sábado, 9 de junio de 2018

El Gobierno de Balsalobre




Demasiadas críticas en relación a una moción de censura totalmente natural, para continuar con el ataque a la nueva composición del gobierno de España. Vaya por delante y para que no haya ninguna equivocación a la hora de leer esto, que aunque un día formé parte del partido que hoy gobierna, puedo decir con total convencimiento que eso jamás volverá a pasar. Dejé muchos amigos, entendidos desde el término coloquial de la palabra, con los que sigo teniendo relación y puedo decir que dentro de sus filas hay gente maravillosa. Tampoco recuerdo cuando fue la última vez que les voté, hecho que veo complicado que vuelva a suceder.

En cuanto a las críticas a la moción presentada por Pedro Sánchez, tenemos que entender que dentro del actual concepto de política que se aplica en nuestro país, la primera misión de cualquier partido político, no es la de gobernar, sino la de echar del sofá a los contrarios para quedarse ellos.

Gobernar un país es fácil. Y mucho más para cualquiera que ocupe una presidencia, un ministerio o cualquiera de las secretarías de estado que pueblan las instituciones. Todas las políticas están inventadas y hacerlo bien desde cualquier ideología, sería hacerlo prácticamente igual. Las políticas económicas modernas, las de aspecto social, defensivas, en materia de sanidad y cualquier otra deberían de ser siempre las mismas. Es decir, las mejores que después de estudiarlas, se puedan llevar a un consenso.

Ahora llega Pedro Sánchez y se rodea de sus ministros. En ese momento, todo el que piensa en centro izquierda está encantado con esos nombres y por el contrario, la ideología de centro derecha critica cada designación.  Y digo yo, ¿qué más da?

Imaginemos por un momento que el Parlamento de España me nombra nuevo Presidente del Gobierno. ¿A quién me llevaría a mi Consejo de Ministros? Claramente a mis amigos. ¡Ya gobernarán los técnicos!

Con mi Primer Vicepresidente no tendría ninguna duda y quizás es el puesto en el que me apoyaría para dilucidar los demás.  Fernando Pizarro tiene la suficiente experiencia para ocupar ese puesto. Es una persona comprometida con la sociedad en la que pierde su tiempo libre ayudando a los más desfavorecidos a través de una institución “tan seria” como la Cruz Roja. Autónomo conocedor del mercado internacional, honrado, versado y leído hasta el punto que solo conozco una persona con más conocimientos que él. ¡Solo yo! Directamente y formando parte de mi gabinete, estarían los lucenses Pablo, doble Vázquez y Fran Muinelo, en Música y Bebidas.

Mi amigo Enrique Montero sería la cabeza visible en el Ministerio de Sanidad. Cualquiera que le conozca, sabe que nombrar ese negociado es decir su nombre. Profesional de cualquier deporte, en estos momentos recorre uno tras otro, los campos de golf de medio mundo, sincero hasta el extremo y sobre todo diplomático, desempeñó su corta vida laboral como banquero en uno de los organismos más importantes del mundo. También Segundo Vicepresidente.

Tengo muy claro quien cogería La Cartera de Defensa. Ese no sería otro que “Gabi”.Toda su experiencia hasta el día de hoy ha sido adquirida en Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado. El día que se nos dé el gobierno, podremos decir más de él, pero anticipo que terminaría con el terrorismo en cualquiera de sus versiones. Pondría al día en términos de gestión y funcionamiento los cuerpos policiales y todo eso en solamente tres días. Ya que no duraría más tiempo en el cargo. Sería sustituido por Antonio, perteneciente al mismo cuerpo, otro experto en armamento y explosivos, que me duraría otros tres días. ¡Y en seis días no haría falta Ministro de Defensa!

Debido a sus relaciones con la industria del melón. Federico sería Ministro de Agricultura, sacrificando así un excelente informático de sistemas, alto cargo en una famosa multinacional americana que podría encargarse también de Ciencia y Tecnología.

Diplomacia, Asuntos Exteriores, Relaciones Institucionales.

Siempre apoyada por Enrique Montero, sería Ana Muinelo la encargada de las relaciones. Volviendo a sacrificar sus capacidades en materia de Educación, contrastada con no me acuerdo si cuatro o cinco licenciaturas y diplomaturas, habiendo sido el cargo de equipo directivo más joven de España en esa materia y siendo en la actualidad la Directora que mayor nota ha sacado en su proyecto a todos los niveles.  No cabe duda que nos tendría que echar una mano, pero dado su saber estar, paciencia, diplomacia y empatía, no nos queda otra que situarla en esos menesteres.

Lidia sería la encargada de La Cartera de Deportes. Es otro de los nombres que no me genera ninguna duda. Su coordinación y evolución en una pista de pádel, me hace pensar que tendría la misma progresión en un gabinete de ámbito deportivo. La rodearía de cinco o seis secretarios de estado ya que tengo un montón de amigos que juegan al tenis y necesitan un trabajo estable y descansado. ¡Ahí no tenemos problemas y alguien de peso a trabajar de asesor con mi ministra, sería Javier Albors! En realidad todo sería una genial jugada para dar trabajo a esta chica, ya que en la sombra sería Toñin el que realmente tendría el poder. Adjunto a este Ministerio, pondríamos al catalán Oskar, ya que tendríamos que erradicar el independentismo a través del deporte, de por vida y es un puesto que le viene al dedillo. En este ámbito y dedicado a la gestión de esta nueva moda, de correr sin sentido y sin otro motivo que el de demostrar que no se esta bien de la cabeza, estará Toni.

Crearía un nuevo ministerio denominado Comodín. Esta cartera sería especialmente creada para Javier Cazalis, ya que no sabemos el día que se va a presentar, ni cómo viene, ni cómo se va, pero es indispensable para equilibrar y solucionar cualquier conflicto que se pudiera presentar.

Para la economía, hacienda y cualquier cosa que tenga que ver con recaudación y dineros, volveríamos a contar con Montoro. ¡Sobran las palabras!

Ramón Brea en Transporte, Miguel Montero en Industria, Comercio y Turismo, Corine Fuentes en Inmigración, Roberto en Justicia y otros cuantos hasta dos o tres mil, completarían todos los cargos de confianza de los que me rodearía. Además de mis dos hijos que figurarían como consejeros delegados de gestión de tarjetas Black, dejando para el final a Luis Eiras y Nony Toro que estarían dedicados a la gestión de fiestas nacionales, locales, patronales, contratación de eventos y orquestas, sobre lo que tienen dilatada experiencia.

¿Qué tendría de malo este Gobierno? Yo creo que no sería mejor que el formado por Pedro Sánchez y que la funcionalidad del mismo se verá demostrada o no con el tiempo que quede hasta que se convoquen elecciones. Ni que decir tiene, que contamos con el mejor servicio de escoltas toda Europa que gestionará Tomás Pollán y que se nutrirá de los especialistas en Combate Úrbano, encabezados por Javier Rodríguez. ¿Vamos preparando partido?

(Estamos cortos de fotos y esperamos recibir las vuestras)

Asuntos Exteriores y Deportes

Presidencia y Vicerpresidencias Primera y Segunda

Consejo de Ministros

Relaciones con el FC. Barcelona (Oskar)

Presidencia y Exteriores con Asesores 




No hay comentarios:

Publicar un comentario