Dos Tontos Todavía Más Tontos. Tomás Gómez y @Martuniki

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Empiezo a pensar que es verdad que existe Dios. Y digo esto porque no puede ser casualidad que todos los tontos terminen juntándose sin que hayan sido creados para ese motivo. Aunque por otra parte también pienso que como es tanto el número de ellos, es raro que de una u otra manera no terminen haciendo grupos que, por desgracia contribuyan a su durabilidad.

Es el caso del tándem formado por Tomás Gómez y Martuniki. Estos personajes, que desde mi punto de vista serían perfectamente intercambiables con Carrey y Daniels como protagonistas de Dos Tontos Todavía Más Tontos, no saben ni cuál es su tejado ni mucho menos hacia dónde tirar las piedras.

En una entrevista en radiocable.com, Gómez articula una sentencia por la que es merecedor del premio al se me ocurre por ejemplo, El ex político más tonto de todos los tiempos. El individuo que ha hundido en la miseria más absoluta al Partido Socialista de Madrid y que, con su herencia no ha conseguido evitar el ridículo más espantoso al Gran Antonio Miguel Carmona, dice que: El Partido Socialista ha perdido muchos votos y que se necesita una reflexión. Pero la vergüenza ajena me invade cuando leo que pretende dejar caer que hubiera conseguido más votos que Gabilondo. ¿Puede alguien callar o curar de sus patologías a este indeseable?

En otro sentido y aunque estemos hablando de alguien sin ninguna entidad política ni profesional, me cuentan que Marta Garrote, nuestra querida cabeza de comparsa, propia de acompañar al Pato Nicol o a Doña Rogelia en esos obsoletos espectáculos que antaño hacían las gracias de niños y mayores, ha publicado en algún sitio que el Partido Socialista ha fracasado por culpa de Pedro Sánchez y que está de acuerdo con Susana Díaz en algo así como que tienen que volver los que se fueron o fueron puestos en la calle para recuperar no sé qué.

No me extraña que en estas circunstancias y con estas herencias, tengamos un centro izquierda hundido en el que hay que trabajar mucho y aun así costará mucho reflotar. Hace falta mucha inteligencia, mucha lógica y humildad para con el tiempo conseguir lo que no es imposible, sacar adelante un partido lleno de buenas gentes que se merece un puesto de privilegio. Empecemos por erradicar a los tontos que sin ningún sentido y solamente con el fin de hacer daño, traban y entorpecen el trabajo necesario para conseguir un bien al pueblo.

El problema viene dado cuando repasando la lista, te das cuenta que no hay lugar para colocar a tanto tonto, ni mucho menos un sitio para estos dos.