Cuando me aburro y eso no quiere decir que no tenga nada que hacer, nada que pensar o ninguna llaga en la que meter el dedo, pero en definitiva me aburro mentalmente, retrocedo históricamente a diferentes épocas para valorar aquellas hazañas ya bien en el campo de batalla o en los foros, pasillos y jardines. Hoy he recordado al cuando joven, valiente soldado y de viejo afamado dictador, quería decir Senador Quinto Fabio Máximo. Y llama la atención en él una frase que recuerdo perfectamente se atribuye al aquél tío tragedias y poeta épico, el gran para mí Ennio:
- Un hombre ha restituido nuestro estado retrasando –
(Aquí vendría la traducción en latín, pero no me lo sé)
Es difícil de entender pero es así. Hay veces que corremos porque creemos que contra antes mejor y solo se trata de equivocarnos a cambio de dormir más tranquilos esa noche. A veces la espera es necesaria y mientras esperamos podemos seguir aburridos y seguir recordando al que en una guerra de desgaste derrotó a Aníbal y consiguió salvar Roma simplemente así, esperando.
Y que bonita es la historia y cuanto aprendemos de ella cuando somos capaces de aburrirnos y dedicar el tiempo a algo que merece la pena de verdad.
Y que bonita es la historia y cuanto aprendemos de ella cuando somos capaces de aburrirnos y dedicar el tiempo a algo que merece la pena de verdad.
Hay una pequeña narración de palahniuk describiendo perfectamente a esta clase de políticos, que son muchos. En un torneo de choques de segadoras el político llega hasta el final gracias a que casi nunca entra en combate y ve como son otros los que se dan. También es verdad, que el político no se entera de que lo molón allí es ser parte de una panda de tarados que se destrozan chocando esas bestias con motor. Pero... demuestra bastante su perfil mental, el que retrasa o se queda retrasado.
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